Ciudad de los Mil Títulos”, “Ciudad Estudiantil”, con estos y otros seudónimos se conoce a la Ciudad

Pamplona, quien brinda tanto al pueblo pamplonés como a toda su comunidad estudiantil diversos tipos de

recreación donde se destacan culturalmente el Parque Águeda Gallardo, Catedral Metropolitana Santa Clara,

Casa de las Cajas Reales, Palacio Arzobispal,  así como también cuenta con escenarios deportivos como

canchas sintéticas repartida en distintos sectores de la ciudad, estadio de futbol Camilo Daza, Coliseo Chepe

Acero, Coliseo Chepe Flórez (Campus Universitario), cancha de futbol Alberto Gonzales (Campus

Universitario),  cachas de Tenis (Campus Universitario), además de esto se puede disfrutar de innumerables

cibercafés proliferados por la gran demanda que poseen.

 

El transporte dentro del casco urbano de la ciudad es bastante favorable a la economía de los estudiantes a diferencia

de otras ciudades, ya que los precios por ejemple de un bus urbano no superan los $1000 y el servicio de taxi que no

superan los $2800 pesos, teniendo en cuenta otros servicios de transporte que se pueden adquirir  como los taxi-

colectivos que favorece y facilitan la economía y el transporte respectivamente.

 

 

 

 

 

 

 

 

Siendo Pamplona una ciudad universitaria y estudiantil, tiene un importante comercio de servicios de apoyo

educativo y proliferan papelerías con diversos servicios de suministro de material de impresión, grabación,

fotocopiado, escáner, empastado, que facilita la labor académica de estudiantes y profesores. Principalmente,

alrededor del campus Universitario, Central y de la Casona y de otras instituciones educativas como el ISER

(Instituto Superior de  Educación Rural), SENA y varios colegios Secundarios.

Una fotocopia cuesta 50 pesos, una impresión de archivos cuesta 100 pesos, si es a color oscilan entre 200 y

400 pesos, precios que contrastan con el de otras ciudades universitarias y frecuentemente ascienden al doble.

 

 

 

Siendo Pamplona una ciudad estudiantil, la hotelería es quizás la principal actividad económica para muchos de sus habitantes, donde miles de estudiantes provenientes de diferentes partes del país son alojados y alimentados durante su estadía en la Ciudad. De acuerdo a esto se hizo un barrido en los sectores centrales  y principales de la Ciudad donde se brinda el servicio de  alimentación y pensión a  estudiantes, para que aquellos que provienen de otros lugares diferentes a Pamplona conozcan los precios que se manejan en la ciudad en cuanto a este tipo de actividad, precios que se acomodan a la economía de los jóvenes estudiantes con respecto a otras ciudades del País.

 

 

 

LA NUEVA PAMPLONA DEL VALLE DEL ESPIRITU SANTO  fue el nombre con el que Pedro de Ursúa y Ortún Velasco de Velázquez reorganizaron en encomiendas (institución socio económica mediante la cual un grupo de individuos debía retribuir a otro en trabajo, especie o por otro medio, a cambio de protección y amparo)  los dispersos poblados de indígenas que encontraron en su marcha hacia el norte, en 1549, provenientes de santa fe de Bogotá. Inicialmente fue un centro que pretendió ser minero de los filones de oro de la cordillera oriental, cercana a los páramos de Berlín y El Almorzadero. Nunca, sin embargo, profundizó en esa tradición, y se mantuvo como un centro de acopio agrícola, favorecido por un clima frio y seco, altamente saludable, barrido por los vientos fríos de los páramos. Con sus calles centrales bien cuadriculadas y en el pasado reciente completamente pavimentadas, ha venido a ser abrigo para cerca de 70.000 habitantes, muchos de los cuales han ido remontándose por las laderas del valle del río Pamplonita, que la cruza de sur a norte. Carente de industrias significativas, tiene un presupuesto que es inferior al de su Universidad; la vida social es animada por casi dos decenas de miles de una población universitaria, que irriga sus recursos económicos en una amplia variedad de servicios de alimentación, vivienda, papelerías y de recreación, y que la vacía en épocas de vacaciones dando la impresión de un pueblo todavía más taciturno.

Su comercio se nutre significativamente de las mercaderías que fluyen en ambos sentidos entre Cúcuta y Bucaramanga, de tal manera que en ella habitan prósperos comerciantes.

Atravesada por la carretera nacional que ocupa toda la parte central de la calle 4, espera el momento en que se construya una variante, lo que daría respiro a las numerosas tracto mulas que con frecuencia se bloquean mutuamente, debido a la estrechez de las numerosas curvas que serpentean por la parte norte de la ciudad, cerca de la Universidad de Pamplona.